lunes, 27 de abril de 2015

Alberta Ferretti: sofisticación femenina

Alberta Ferretti es una de las diseñadoras más veteranas de la moda italiana. Nació en 1950 en Cattolica, una ciudad de la costa adriática, que ha sido desde siempre su principal centro de operaciones y donde abrió su primera tienda la cumplir la mayoría de edad.  Con tesón, esfuerzo y, sobre todo, mucho talento logró hacerse un hueco en el mundo de la moda con su propia marca, a la que completó, pocos años después, con una segunda línea, más joven, denominada Philosophy. Responsable, junto a su hermano, de la empresa Aeffe -propietaria de la mayor parte de firmas como Jean Paul Gaultier, Ungaro o Narciso Rodriguez-, cercana, familiar y comprometida, es una de las pocas mujeres que puede presumir de poseer y controlar una firma de moda con una larga -y solvente- trayectoria en la industria.

Alberta Ferretti. Fuente: Zimbio

La carrera de Alberta Ferretti en el mundo de la moda se remonta a 1974, cuando crea una pequeña boutique donde vender sus creaciones. El local de dos plantas le permitirá acercarse al público, ya que es ella misma la que se encuentra tras el mostrador, pero también contar con un pequeño taller, en la planta de arriba, desde el que dar rienda suelta a su imaginación. Y así, en este primer contacto con la moda, comenzar a fraguar el lanzamiento de una marca que no tardará mucho en convertirse en un referente a nivel internacional.

Seis años más tarde, ya en 1980, Alberta crea su propia empresa de diseño y producción de prendas, Aeffe SPA, junto a su hermano Massimo, primer paso hacia la creación de la identidad Ferretti. Y a partir de entonces, todo rueda. En 1983 debuta en la prestigiosa pasarela de Milán y en 1984 crea su celebradísima segunda línea, Philosophy di Alberta Ferretti, una apuesta por el mercado más joven, no sólo por el punto étnico que siempre destilan sus colecciones, sino por sus precios, algo más bajos.

Los años 90 son esenciales en la carrera de Alberta Ferretti. Alejada del canon que se impone en Estados Unidos, donde el minimalismo de Calvin Klein o Donna Karan causa furor, la marca italiana propone a una mujer que encuentra la sofisticación no en la sobriedad, ni tampoco en el exceso, pero sí en resaltar lo mejor de la condición femenina a través de gasas y rasos que marcan su anatomía, sin resultar obscenos. La década de los 90 es también importante para esta firma porque la marca traslada su sede al Castillo de Montegridolfo, la que es aún su casa cerca de Rimini, lo que le valdrá en el año 2000 la Medalla de Honor a a Conservación de los Bienes Culturales de Italia. 


Colección Philosophy Otoño/ Inverno 2011
Fuente: Art8amby

Desde 2001, Alberta Ferretti ha expandido su negocio a través de la creación de prendas de baño y moda íntima y más recientemente a través de Alberta Ferreti Girls, con ropa infantil para las pequeñas fashionistas, y ha consolidado su visibilidad a nivel mundial a través de la apertura de tiendas de la marca en varios continentes.

Una de sus principales aportaciones al diseño de ropa ha sido apostar por la armonía de las formas y la ligereza de las prendas. A ella se debe el vestido-combinación, una prenda muy femenina y sensual, dos adjetivos que definen sus creaciones. Fiel a este principio, supo desmarcarse del estilo unisex y minimalista de los trajes de chaqueta imperante en los años 90 y proponer pequeñas camisetas con chaquetas de punto por encima, que hoy se han convertido en indumentaria habitual de muchas mujeres.

Alberta Ferretti ha convertido a las actrices norteamericanas en las heroínas de su historia y ha hecho de Hollywood el escenario de su cuento. Con una lista de nombres cuasi interminable, las estrellas de la meca del cine que se declaran abiertamente fanáticas del elegante, femenino y sutil Made in Ferretti van desde Uma Thurman a Julia Roberts pasando por Salma Hayek Naomi Watts

Desfile Primavera/Verano 2014.
Fuente: Pecari
Fuente: Hola, NeoModa, Vogue

miércoles, 22 de abril de 2015

Dolce&Gabbana: pareja de moda

Domenico Dolce entra en contacto con el mundo de la moda desde niño, gracias a su padre Saverio, costurero de profesión y dueño de una pequeña tienda de ropa, luego de salir del bachillerato estudia diseño de modas en el Instituto Marangoni de Milán reconocido como el mejor del mundo y el más antiguo de Europa. Diferente es el camino de Stefano Gabbana, que en un principio estudia Artes Gráficas en Monza, pero que muy pronto descubre que su verdadera pasión es la moda.
El encuentro entre los dos ocurriría a mediados de los 70, al coincidir en una empresa de un diseñador textil. Pronto descubren que tienen una gran afinidad y después de algunos años en diferentes empresas deciden en 1981 fundar su propia empresa. 


Domenico Dolce y Stefano Gabbana.
Fuente: Ellahoy

En 1985 nace la marca Dolce&Gabbana con el primer desfile en Milán Colecciones, en la sección de Nuevos Talentos. Tras exhibirse esta primera colección de ropa femenina, comenzaron a darse a conocer pero el verdadero salto no les llegó hasta dos años después, con un desfile dedicado a las raíces latinas y al cine neorralista italiano de los años 40 y 50. En 1990 presentan la primera colección para hombre y realizan en Nueva York el primer desfile de hombre y mujer, y abren una Show-room en la gran ciudad. El negocio creció rápidamente, convirtiéndose en una de las marcas más representativas de la moda italiana en el mundo y llegando a ser una de las principales marcas del mundo en el ámbito textil y del lujo.

Muchas ideas originales granaron las siguientes colecciones de Dolce&Gabbana: vestidos llenos de flores y brocados, trajes pantalón de rayas finas; aunque sin duda fue la revisión del corsé uno de sus trabajos con mayor repercusión. Madonna, una de sus más fieles clientas, realizó una de sus giras musicales mostrando varios corpiños profusamente adornados con bisutería fina y diseñados en exclusiva para ella. Siguiendo este estilo provocativo, también son los responsables de que otras prendas que en el pasado sólo se exhibían en la alcoba, como la combinación, se conviertan en imprescindibles del armario femenino.

Dolce & Gabbana tiene una amplia red de boutiques distribuidas por todo el mundo, específicamente en Europa, Asia, Norteamérica y Sudamérica.
Desde los 90 han ganado multitud de premios por sus campañas publicitarias y colecciones. Algunos ejemplos son: En 1996, "Dolce&Gabbana Pour Homme" vence los premios franceses "Oscar des Parfums" otorgado por primera vez a un perfume italiano, y el Premio "Designer of the Year" en el 96 y 97, otorgado por los lectores de la revista inglesa FHM. En 2003, se les otorga en Nueva York el premio de la revista GQ como los mejores diseñadores de moda masculina, en el transcurso de la prestigiosa ceremonia de GQ llamada premios a los hombres del año.

Colección  D&G Primavera 2015.
Fuente: Taryncoxthewife

Dispuestos a cumplir durante el 2002 sus 17 años de pareja empresarial indestructible, Domenico y Stefano han recibido ofertas millonarias provenientes de multinacionales del lujo para que pusieran precio a su empresa, pero ellos, hasta ahora, no han querido vender ni siquiera un trocito de su más que próspero negocio.

La compañía y más concretamente los diseñadores han atraído el interés de los medios de comunicación por su apoyo al movimiento gay y ser ellos mismos una pareja gay reconocida. En 2005 los dos diseñadores rompieron sentimentalmente, aunque siguieron diseñando juntos, pues según Stefano trabajan muy bien juntos y se entienden muy bien. Ya conocidos como "Los Midas de la moda", Dolce&Gabbana han triunfado con todas sus etiquetas,parecen no resistirse a nada; su primera línea Dolce&Gabbana, la línea juvenil D&G, D&G Jeans, la línea de lencería y ropa interior femenina y masculina, zapatos, complementos y gafas y perfumes, son sus semillas de oro en el Made in Italy.

Su impresionante oficina de Milán está instalada en una villa del siglo XIX, y allí trabajan con un equipo de personas con las que mantienen una relación casi fraternal. También han adquirido una mansión en la Riviera francesa porque desean estar siempre cerca de su amado Mediterráneo, al que consideran una fuente inagotable de inspiración. La extrovertida pareja cuenta entre sus fieles con celebrities reconocidas a nivel mundial, de la talla de Madonna, Scarlet Johansson, Isabella Rossellini, Killie Minogue, Ivanna Trump, Elle McPherson o Sofía Loren. 

Popular perfume Light Blue.
Fuente: Perfumesmadrid

martes, 14 de abril de 2015

Moschino: pura extravagancia

Franco Moschino nació en 1950, en un pueblo cerca de Milán, ciudad a la que se fue a estudiar Bellas Artes en 1968. Rápidamente consiguió trabajo como ilustrador en varias revistas, labor que compaginaba con colaboraciones para las marcas como Blumarine.
La firma Moschino nacía a comienzos de la década de los ochenta, en 1983, con la intención, según Franco Moschino de crear “trajes económicos, útiles y prácticos. Con ese aire de desenfado e ironía que tanto necesitamos todos”.  La ropa Moschino es excesiva, extravagante, gráfica, icónica y divertida, muy divertida, desde su debut como modisto en 1983, sorprendieron por su originalidad y valentía, al igual que sus impactantes campañas de publicidad.

Colección de 2014 Inspirada en la muñeca Barbie
Fuente: Eonline

En 1986 lanzó su línea masculina y al año siguiente se atrevió con su primer perfume. En su febril actividad creó también su segunda línea, llamada Cheap & Chic.
En plena vorágine de éxito Moschino abrió, en 1989, su primera tienda en Milán. Un año después sorprendió al mundo con una campaña titulada Stop The Fashion System (Paren el sistema de la moda), con la que alertaba sobre el peligro de convertirse en una víctima de la moda. Ese mismo año recibió el premio Aguja de Oro y abrió su segunda tienda en Milán.

En 1993, para celebrar sus diez años dedicado a la moda, organizó una exposición sobre su obra titulada X Years Of Kaos (X años de caos), en la que quedaba más que patente su gran aportación al mundo del diseño.
En 1994, pocos meses antes de morir, Moschino presentó su primera colección ecológica, llamada Ecouture, toda confeccionada con materiales extraídos de la naturaleza. El 18 de septiembre del mismo año el sida acabó con su vida, pero de ninguna manera con su forma de interpretar la moda.

El espíritu irreverente y contestatario fue uno de los pilares sobre los que se fundó la marca italiana y también uno de los máximos responsables de su éxito. Un éxito basado en el desasosiego del espectador y la ironía del creador que vino a poner patas arriba el mundo de la moda -por aquel entonces un tanto endogámico y conservador–. Su creador siempre se consideró más un artista/publicista al más puro estilo Andy Warhol, que un diseñador al uso. Quizá por ello, la marca encontró en la ironía publicitaria -campañas que junto a las de Toscani para Benetton sentarían las bases de gran parte de la industria de la publicidad contemporánea- el mejor aliado para sus creaciones. Tras unos años en la sombra, la firma vuelve a sonar con fuerza en 2013, tras el nombramiento como nuevo director creativo del irreverente Jeremy Scott. La unión se materializó en forma de primera colección para el otoño-invierno 2014/15.

Colección de 2014 por Jeremy Scott inspirada
 en Mcdonals. Fuente: Polyvore

Fuente: Hola, Vogue

miércoles, 8 de abril de 2015

Bottega Veneta: marroquinería de excelencia

A diferencia de otras grandes marcas, Bottega Veneta no lleva los apellidos ni el nombre propio de su fundador o fundadores, Michele Taddei y Renzo Zengiaro. Esta singular marca alejada de las apariencias de la onomástica y de lo rimbombante del apellido busca otras fórmulas para llegar al público: Bottega significa taller en italiano y Veneta viene de la región de Veneto, lugar donde comenzó todo. La piel trenzada y el tono clásico, atemporal y alejado de la ostentación son algunos de los componentes del ADN de esta firma fundada en el año 1966 en Vicenza, Italia, lugar en el sigue estando, aún hoy día, su base de operaciones. 

Bolsos de piel de serpiente.
Fuente: Istarhandbags

Poco después de su fundación se convirtió, por derecho propio, en la embajadora de la industria peletera de calidad italiana en los EE. UU. y en una de las marcas predilectas de los asistentes de la famosa discoteca "Studio 54", incluidos Andy Warhol o Jackie Kennedy. En los 90 la marca se ve sumergida en una aguda crisis. El motivo principal fue que, ante la fiebre del logo que corría por aquel entonces, desde la firma italiana se decidieron a incluir sus insignias en las prendas lo cual ahuyentó a la clientela habitual y condujo a la casa hasta una situación casi de bancarrota.

En 1998 los fundadores de la marca conocen a Giles Deacon, al frente de la firma durante tres años, al que nombraran director creativo con la intención de relanzar Bottega Veneta y remontar la mala imagen de principios de los noventa. En 2001, el grupo Gucci se hace con el control de la casa italiana y pone al frente del diseño al alemán Tomas Maier. Este presentó su primera colección de la firma para la temporada Primavera/Verano 2002, tras haber trabajado para Sonia Rykiel y Hermès entre otros. Maier que contaba con el beneplácito de Tom Ford, por aquel entonces diseñador de la marca, se lanzó al mundo del prêt-à-porter y recupera la discreta elegancia de la marca, destierra cualquier atisbo de logotipo y propone el característico trenzado de la Bottega Veneta como el hilo conductor de sus colecciones hasta la actualidad.

Conocida por su savoir faire y la calidad de sus productos, sus creaciones se identifican por una técnica de entrelazado del cuero a la que llaman "intrecciato". Ése es el sello distintivo de la marca, que curiosamente no usa logos ni para sus bolsos ni para el resto de sus productos. Algunas de las celebrities que han vestido de Bottega Veneta desde entonces son Sandra Bullock, Cameron Diaz, Diane Kruger, Hilary Swank, Jennifer Connelly o Julianne Moore.


Vestidos de novia Bottega Veneta 2011
Milan Fashion Week. Fuente: Onewed